En voz alta

El lenguaje del desecho - Crispin Thurlow

DATOS

01/06/2023

COMPARTIR

El lenguaje del desecho  - Crispin Thurlow

 

 

Cuando nos percatamos del desecho, o cuando este toca los registros más viscerales del ser y nos inquieta, se nos recuerdan las intensidades y multiplicidades del cuerpo. … nos puede permitir ver cómo estamos en el mundo y somos parte del mundo.

 

Desde la perspectiva de los Estudios Culturales, Gay Hawkins (2006: 121; cita anterior) explica cómo el desecho es un fenómeno sociocultural poderoso, algo fundamental para la percepción humana de estar en el mundo y ser parte del mundo. El desecho es una parte tan importante de lo que nos hace humanos como el lenguaje. Y esto es lo que convierte en extraño el desinterés aparente por el desecho entre lxs lingüistas socioculturales. Además, el desecho es también un “registro del ser” en un sentido literal y no solo en un sentido metafórico. Uno de mis ejemplos favoritos es la instantánea de la vida semanal en Suiza: periódicos y folletos publicitarios perfectamente empaquetados y colocados en la acera para su recogida y reciclaje. En su forma escrita e impresa, en este ejemplo tenemos el lenguaje “cosificado” y listo para ser desechado.

                                                                                                                                        

Con estas ideas generales en mente, he estado explorando las contribuciones posibles que lxs lingüistas socioculturales (analistas del discurso, sociolingüistas, etc.) podrían hacer al campo interdisciplinario de los Discard Studies (‘estudios del deshecho’; ver Thurlow, 2022). En comparación con los antropólogos, sociólogos y geógrafos, lxs lingüistas socioculturales han sido en realidad muy lentos en ocuparse del desecho. Gracias a una beca de la Fundación Nacional de las Ciencias de Suiza, ahora, y en colaboración con tres investigadxres doctorales (Alessandro Pellanda, Charmaine Kong, y Laura Wohlgemuth), puedo llevar mis ideas iniciales más lejos. Bajo la rúbrica de Articulating Rubbish, nuestro nuevo proyecto tiene como objetivo generar un enfoque sociolingüístico único al vincular lenguaje y desecho y viceversa. Y aún más importante –quizás– creemos que el desecho y las prácticas del desechar también pueden ayudar a iluminar fenómenos sociolingüísticos clave.

            Siguiendo de cerca el terreno de investigación trazado en Thurlow (2022), el proyecto Articulating Rubbish se organiza en torno a cuatro líneas principales de investigación, que son cuatro razonamientos conceptuales y empíricos para abordar el lenguaje del desecho.

1. La vida social de la basura. El desecho no es una propiedad inherente, sino más bien relativa de las cosas; en pocas palabras, una cosa se convierte en “desecho” o “basura” cuando creemos que es así o cuando decimos que es así. Desechar es, por lo tanto, una práctica inherentemente social e inevitablemente relacional; en otras palabras, es una cuestión discursiva. Esta es una de las razones por las cuales el desecho es en realidad un lugar obvio para la atención sociolingüística: el lenguaje es central para el etiquetado, la categorización y la constitución performativa del desecho. Además, al evitar los lugares “sucios” y las vidas “crudas” del desecho o específicamente de la basura, lxs lingüistas socioculturales también ignoran dos tipos de relaciones sociales importantes: primero, la vida social de las personas que viven y trabajan con/en la basura; y segundo, la relación social entre nosotrxs, hacedores de basura, y estas personas que están ahí para recoger los restos. El mensaje principal es este: donde hay basura, hay vida social; y donde hay vida social, con toda seguridad, hay lenguaje.

2. Discursos del desecho. Como digo, el lenguaje es central en la construcción social del desecho, es decir, en cómo la gente atribuye (o no) valor a las cosas que guardamos o tiramos. Estos tipos de significados sociales y valores culturales también son producidos y divulgados/diseminados por discursos de mayor escala. Se debe enseñar a la gente, por ejemplo, el valor del reciclaje y, antes de eso, también el valor de las cosas y de la basura. Esta “escolarización” ocurre invariablemente a través del lenguaje en los contextos de las conversaciones cotidianas –por ejemplo, en las negociaciones familiares sobre los restos de comida–. Pero el lenguaje también es central en los “regímenes documentales” (ver Cavanaugh, 2022) de la gestión pública de residuos y en el discurso mediatizado sobre, por ejemplo, la crisis medioambiental, el anticonsumo y las iniciativas zero waste. Es precisamente de esta manera que el desecho esta texturizado o, en términos más sociolingüísticos, entextualizado. Y esto puede suceder de formas más precisas y útiles o imprecisas e inútiles.

3. La basura como recurso comunicativo. Como antropólogo del desecho, Joshua Reno (ej. 2014: 16 ; ver también Reno, 2022) documenta la necesidad cultural y/o la importancia social del desecho y, en concreto, la identificación de los “enmarañamientos materiales y semióticos” en el desecho y los residuos. Dicho en pocas palabras, el desecho puede funcionar (y lo hace) como un recurso de significación por derecho propio. Y aquí vemos otra oportunidad para lxs lingüistas socioculturales: investigar y documentar la forma en que se utiliza el desecho (de manera abierta o encubierta, intencional o no) como un recurso semiótico para realizar ciertos tipos de identidades y para estructurar las relaciones sociales y de poder. Sin sobredeterminar la noción del desecho, los tipos de identidades y relaciones promulgadas con/por el desecho y la basura se ejemplifican bien en las prácticas ordenadas de reciclaje en Suiza (como se mencionó anteriormente).

4. La producción discursiva del valor. Hay al menos otra contribución distintiva y decididamente sociolingüística que se puede hacer para los Discard Studies. El desecho es inevitablemente una cuestión de la producción de valor; más que esto, la producción de valor es inherentemente una cuestión discursiva. Un principio central de la teoría del desecho es que los objetos se “desperdician” no debido a sus propiedades físicas inherentes, sino más bien a través de procesos de valoración sociales y relacionales. Así como a las cosas (mercancías o de otro tipo) se les da un valor, también se las devalúa. A veces esto es una cuestión de precio, pero más a menudo es una cuestión de valía. Esto implica inevitablemente una evaluación de los objetos, una apreciación de que no solo valen algo, sino que también son valiosos –o no–. Estos juicios se hacen sobre la base de la “bondad” o “maldad” percibida, la deseabilidad o indeseabilidad; todos estos son los efectos sociolingüísticos esenciales de la toma de postura (en inglés stancetaking). Esta es una herramienta analítica útil con la que podemos contribuir a los Discard Studies.

            Para concluir, el desecho no es solo un enorme problema social y ambiental, sino también una tarea teóricamente vasta. Como indiqué, lxs estudiosxs de otros campos académicos se han estado empeñado con el estudio del desecho durante ya algún tiempo, ayudando a ampliar y enriquecer nuestra comprensión sobre el tema. El desecho es ciertamente un fenómeno complejo y diverso con todo tipo de ramificaciones sociales, políticas y económicas. También hay importantes enmarañamientos semióticos y culturales en el desecho –en la basura, los desperdicios, los residuos, los restos, etcétera–. En particular, estamos todxs nosotrxs –como estudiosxs o como ciudadanxs– íntimamente conectados a través del desecho con aquellas personas invisibilizadas o escondidas, quienes están encargadas de ocuparse de nuestra basura. Estos son los tipos de relaciones que surgieron cuando empezamos a percibir el desecho. Y cuando surgieron estas relaciones, surgió el lenguaje. Por cierto, ¿no es quizás esta una razón por la cual lxs lingüistas socioculturales también deberían comenzar a notar el desecho?

 

Agradecimientos

Este texto forma parte de un proyecto financiado por la Fundación Nacional Suiza de Ciencias (#100015_215102) titulado Articulating Rubbish: A Sociolinguistic Approach to the “Crisis of Waste”. Agradezco a Yvette Bürki y a Eva Codó su ayuda por corregir y pulir mi español.

 

Crispin Thurlow es Profesor de Lengua y Comunicación en la Universidad de Berna, Suiza

COMENTARIOS

Para poder hacer comentarios debes estar registrado

Sin comentarios

Responsable:
La Asociación de Estudios del Discurso y Sociedad (EDiSo) - NIF/CIF: G86647906 Dir. postal: Ctra. Cantoblanco, Km. 15 Departamento de Lingüística, Lenguas Modernas, Lógica y Filosofía de la Ciencia Universidad Autónoma de Madrid Provincia: 28049 – Madrid., Email: info@edisoportal.org.
En nombre de la empresa tratamos la información que nos facilitáis para ofrecer el servicio solicitado, y hacer la facturación. Los datos proporcionados se conservarán mientras se mantenga la relación comercial o durante los años necesarios para cumplir con las obligaciones legales. Los datos no se cederán a terceros excepto en los casos en que haya una obligación legal. Tenéis derecho a obtener confirmación sobre sí en EDiSo estamos tratando tus datos personales. Por lo tanto, tenéis derecho a acceder a vuestros datos personales, rectificar los datos inexactos o solicitar la supresión cuando los datos ya no sean necesarias.